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VATICANO,
18 Ene. 16 / 09:59 am (ACI).- En la
homilía de la Misa que
presidió esta mañana (ayer) en la capilla de la Casa Santa Marta donde reside, el Papa
Francisco reflexionó sobre la importancia de tener un corazón abierto a las
sorpresas de Dios, a las novedades del Espíritu Santo, para que cada uno de los
fieles sea capaz de superar la “idolatría de uno mismo” que se encierra en la
obstinación de hacer las cosas porque “siempre se ha hecho así”.
El Papa,
señala Radio Vaticano, afirmó que “este es el mensaje que hoy nos da la Iglesia. Esto es lo que Jesús dice con tanta fuerza: ‘Vino nuevo en odres
nuevos’. A las novedades del Espíritu, a las sorpresas de Dios, incluso las
costumbres deben renovarse. Que el Señor nos dé la gracia de un
corazón abierto, de un corazón abierto a la voz del Espíritu,
que sepa discernir lo que ya no debe cambiar, porque es un cimiento, de lo que
debe cambiar para poder recibir la novedad del Espíritu Santo”.
El Santo
Padre meditó sobre la Primera Lectura en la que Dios rechaza a Saúl que escucha
al pueblo antes que al Señor. El pueblo, tras vencer en una batalla, quería hacer
un sacrificio con el mejor ganado porque “siempre se ha hecho así”. Por ello el
profeta Samuel reprocha a Saúl y lo cuestiona: “¿Acaso al Señor le agradan los
holocaustos y los sacrificios sobre la obediencia a su voz?” Lo mismo –dice el
Papa– nos enseña Jesús en el Evangelio”.
Los
doctores de la ley le reprochan que los discípulos no ayunaban como siempre se
había hecho y Jesús responde “con este principio de vida”: “nadie
pone un remiendo de paño sin remojar en un manto viejo porque la pieza tira del
manto, lo nuevo de lo viejo, y al final empeora. Nadie
echa vino nuevo en odres viejos porque revientan los odres y se pierden el vino
y los odres; ¡a vino nuevo, odres nuevos!”
“¿Qué
significa esto? ¿Que la ley cambia? ¡No! Sino que la ley está al servicio del
hombre, que está al servicio de Dios y por esto el hombre debe tener el corazón
abierto. El ‘siempre ha sido hecho así’ es de un corazón cerrado y Jesús nos ha
dicho: ‘Les enviaré al Espíritu Santo y Él los conducirá a la verdad plena’. Si
tú tienes el corazón cerrado a las novedades del Espíritu ¡jamás llegarás a la
verdad plena! y
tu vida cristiana será una vida a medias, una vida parchada, remendada con
cosas nuevas, pero sobre una estructura que no está abierta a la voz del Señor.
Un corazón cerrado porque no eres capaz de cambiar los odres”.
El Papa
subrayó que “este es el pecado del rey Saúl, por el que ha sido rechazado. Es
el pecado de tantos cristianos que se aferran a lo que se ha hecho siempre y no
permiten que se cambien los odres y terminan con una vida a medias, parchada,
remendada, sin sentido”.
El pecado
“es un corazón cerrado” que “no escucha la voz del Señor, que no está abierto a
la novedad del Señor, al Espíritu que siempre nos sorprende”.
“Los
cristianos obstinados con el ‘siempre se ha hecho así’, ‘este es el camino’,
‘esta es la senda’, pecan: pecan de adivinación. Es como
si fueran a ver a una adivina: ‘Es más importante lo que se ha
dicho y que no cambia; lo que siento yo –por mi parte y de mi corazón cerrado–
que la Palabra del Señor’. También es un pecado de idolatría la obstinación: el
cristiano que se obstina, ¡peca! Peca de idolatría. ‘¿Y
cuál es el camino, Padre?’: abrir el corazón al Espíritu Santo, discernir cuál
es la voluntad de Dios”.
El Papa
explicó asimismo que “en tiempos de Jesús era habitual que los buenos israelíes
ayunaran pero hay otra realidad: está el Espíritu Santo que nos conduce a la
verdad plena y por esta razón Él tiene necesidad de corazones abiertos,
de corazones que no estén obstinados en el pecado de idolatría de sí mismos en
los que es más importante lo que yo pienso que aquella sorpresa del Espíritu
Santo”.
Fuente:www.aciprensa.com/noticias/el-papa-explica-por-que-es-vital-un-corazon-abierto-a-las-sorpresas-de-dios-94620.
Hernán Castro Rodríguez, Editor de Vemos y Escuchamos.
Notas y referencias: Aciprensa, www.mundotkm.com, Biblioteca virtual.
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